Eusko Lorak realiza una exposición de su proyecto actual
Durante las próximas semanas, la Escuela de Música acoge esta muestra de fotos, textos y trajes del grupo de danzas
Del 23 de marzo al 23 de abril, la Escuela de Música de Sestao acogerá una exposición sobre Eusko Lorak en la que el grupo de danzas expondrá el proyecto en el que se encuentra inmerso actualmente, mostrando fotografías con textos explicativos sencillos y con los trajes que se utilizan en cada época del año. “La idea de esta exposición surgió a raíz de que la gente, acostumbrada a la misma música, las mismas danzas y la misma ropa, comenzaba a preguntarnos de qué pueblo eran los bailes y de qué época eran los trajes que estábamos representando ahora. Y creímos que lo mejora era responder exponiendo brevemente lo que hemos ido construyendo”, señalan desde Eusko Lorak.
Una de las cosas que más llamará la atención de la exposición serán los trajes: “No tanto sus colores, imagen o apariencia, sino comprender que es un traje que nace en Sestao”, recalcan.
Este nuevo proyecto surgió en la pandemia. El parón dio la oportunidad de reflexionar sobre lo que se estaba haciendo y lo que se quería hacer. Pero no fue un viraje hacia algo desconocido, sino que Eusko Lorak se inspiró en sus grupos de referencia. “Se trata de dejar de replicar únicamente danzas que se habían guardado en otro pueblos, y hemos intentado reducir a la esencia esas expresiones para extraer algunos elementos comunes en ellas, y así integrar el folklore, inicialmente rural, en el entorno urbano en el que actualmente sucede la vida, sin olvidar las expresiones que se hayan podido dar en este tiempo en nuestra zona”, explican.
Primeros resultados
Los resultados no son inmediatos y dejar atrás las inercias es complicado. “Sentimos una gran implicación e ilusión en nuestra gente. El primer resultado se dio el año pasado en Santa Águeda, cuando presentamos el aurresku en cuerda. Después, en junio, presentamos egu-dantzak, unas danzas de palos, cintas y arcos propias del tiempo del corpus, y en las fiestas de Sestao, por primera vez, el aurresku fue también en cuerda, compuesta por varios miembros de la comisión. Este 11 de marzo presentamos la ezpata-dantza, en la que nos juntamos más de 50 personas, y en julio del pasado año vino el grupo Duguna a bailar en San Ignacio. El pueblo tuvo la ocasión de conocer este tipo de bailes, que viven además en las plazas”, indican desde Eusko Lorak.
La expresión popular donde más claro se ve esta dicotomía rural-urbano es en los carnavales. “La identidad de lo popular se ha ido creando aquí en torno a la zona metropolitana, y nosotros queremos integrar los elementos de la danza tradicional que se han guardado fuera de ella, huyendo de lo aséptico de la ciudad y buscando el apego a algo más propio; pero, a su vez, no conviene despegarse tanto de lo que ya haya podido surgir en el entorno urbano. Es ahí donde está la importancia y la dificultad de acertar”, añaden.
Arraigo
Se trata de un proyecto ilusionante en el que se han incorporado muchas personas que están disfrutando y aportando. Se han reforzado las relaciones personales y con otros grupos, “lo que nos acerca más a la realidad social”, remarcan. Son más de 65 años de actividad, y eso hace arraigar, no los años, sino la actividad, que es el compromiso con otras entidades del pueblo y la participación en la vida cultural y social. “Buscamos la integración sociocultural y el sentimiento de pertenencia a un pueblo y a una forma de ver la cultura. No dudamos que Eusko Lorak ha sido referente en la vida cultural, y con este nuevo rumbo queremos poner los mimbres para que, en el futuro, las personas de Sestao sigan considerando a nuestro grupo como algo suyo”, concluyen.