Restaurado el mural de Ibarrola que preside el Salón de Plenos de Sestao

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Acto oficial en el que se presentó la restauración del mural

Un equipo de la UPV/EHU ha llevado a cabo los trabajos para subsanar desperfectos, reavivar los tonos y proteger de agentes externos esta obra que data de 1962 y que lleva 20 años en el ayuntamiento

Restaurado el mural de Ibarrola que preside el Salón de Plenos de Sestao

El mural que preside el Salón de Plenos del Ayuntamiento, obra del artista Agustín Ibarrola y que lleva por título ‘Naval y Altos Hornos’ ha sido restaurado por un equipo de la UPV/EHU.

El profesor de Bellas Artes Fernando Bazeta ha dirigido los trabajos de restauración junto a Erika Tarilonte y la sestaoarra Erika Madariaga, acompañados por alumnas de la Facultad que están cerca de graduarse. El primer paso fue la detección de posibles daños en la superficie, percatándose de varias oquedades, fisuras y depósito de polvo y microorganismos, desperfectos que fueron subsanados. Posteriormente, se aplicó una capa de protección para reavivar los tonos y protegerlo de agentes externos.

En el acto de presentación de la restauración estuvieron presentes algunas de las personas que han tomado parte en la restauración, representantes de los todos los grupos políticos, el acordeonista Julen Murga, que tocó una pieza musical, y familiares de Ibarrola, un artista estrechamente ligado a la comarca. “Es una suerte tener en el Ayuntamiento una obra que bien podría estar un museo y conservando en buenas condiciones esta obra, contribuimos a mantener su legado”, señalo la alcaldesa, Ainhoa Basabe.

El mural fue pintado en 1962  a propuesta de un albañil amigo de Ibarrola, Matías Martínez, para el Bar El Chato, que posteriormente fue sede del PCE. Y en 2004 fue donado al Ayuntamiento por el comerciante José María Alonso, quien amplió su establecimiento hacia el local en el que se hallaba el mural. Aprovechando este trasladó ya se realizó una primera restauración.

El cuadro tiene una dimensiones de 3,86 metros de largo y 1,60 metros de alto. Refleja en tonos negros, grises, blancos y ocres la vida industrial tanto de Altos Hornos como de La Naval. El propio Ibarrola puso su firma en el mural en el año 2010, en un acto celebrado en el consistorio.

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